Humberto Alvarado Prado recordado por quevedeños

"Su recuerdo quedará impregnado en la memoria de cada uno de los quevedeños". Esta es una de las frases que pasaban ayer (sabado) en el canal 39 ROQ, de propiedad del asambleísta Humberto Alvarado Prado.
A más de un quevedeño le tomó por sorpresa saber de su deceso, aunque hace tres meses estuvo en Quevedo donde se lo veía desmejorado y donde el gobierno municipal le hizo un reconocimiento en vida. Alvarado sufría de una pancreatitis y su deceso se dio en un hospital de Guayaquil
En esa ocasión, Alvarado anunció el estudio sobre la iuminación para el estadio Siete de Octubre e indicó sobre el avance del Tercer Puente al cual se le desea poner su nombre pero Alvarado mencionó que mejor debería llamarse "Ciudadanos de Quevedo".
Una persona que recuerda su memoria es Blanca Recalde de 65 años y habitante de la ciudadela Santa Rosa de Quevedo, quien dijo que cada termino de año ponía en sintonía la radio Ondas Quevedeñas, pues el radiodifusor indicaba a cada minuto cuando faltaba para terminarse el año.
"Hoy me queda un gran vació, ya no habrá a quien escuchar cuando termine el año" dijo Blanca.
Además recordó que cada mañana cuando él daba las noticias tenía un comentario y terminaba con la frase "Todo por Quevedo, todos por Los Ríos todo por el país".
Humberto Alvarado Prado es reconocido en la provincia por haber creado la extensión de Facultad de Comunicación Social de la Universidad de Guayaquil y dirigirla por más de 20 años, ahí se han formado la mayoría de periodistas quevedeños.
Debido a esto ha recibido varios reconocimientos a nivel periodistico y formó parte de la presidencia de la Confederación de Periodistas por tres periodos y cuatro veces fue Presidente de la Federación Ecuatoriana de Rdiodifusión nucleo Los Ríos, dos veces presidente del Colegio de Periodistas de Los Ríos.
Fue propietario de la primera radioemisora de Quevedo "Ondas Quevedeñas" y luego ingreso en FM con Stereo Sonido, además construyó el Hotel Quevedo y el Rancho San Vinicio.
Actualmente era Asambleísta de Los Ríos por PAIS y hoy continua en el cargo la administradora de sus bienes Maruja Serrano.
En su vida Alvarado se hizo acreedor de innumerables reconocimientos a lo largo y ancho del país, entre ls que se pueden destacar en octubre de 1985 un reconocimiento al mérito cultural de primera clase por la municipalidad de Quevedo, condecoración de la Conape declarándolo el mejor radiodifusor del año 1986; condecoración del Concejo Provincial de Los Ríos al mejor Periodista y radiodifusor en octubre de 1986; condecoración por la Fenape al mérito periodístico; reconocimiento del Concejo Provincial de Los Ríos al Mejor Ciudadano en octubre de 1987; condecoración de la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión Nacional al mérito Radial Nacional en septiembre del 1991; condecoración de la Conape al mejor dirigente del Periodismo Nacional en agosto de 1992; condecoración de la Asociación de periodistas de Guayaquil en 1993; condecoración El Primer Micrófono de Oro por la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión del Ecuador (AER) en 1995.
Entre los cargos que desempeñó fueron Gobernador de la provincia en el año 2003; Presidente de la Confederación Nacional de Periodistas del Ecuador (Conape) por tres periodos consecutivos; Presidente de la Federación Ecuatoriana de Radiodifusión núcleo de Los Ríos, estando cuatro periodos bajo su mandato; Presidente del Colegio de Periodistas de Los Ríos por dos periodos; Presidente de la Federación Nacional de Periodistas del Ecuador (Fenape); Vicepresidente de la Federación de Periodistas del Ecuador (Fenape); Concejal de la Ilustre Municipalidad del cantón Quevedo por dos ocasiones.
Alvarado sufría de una pancreatitis y su deceso se dio en un hospital de Guayaquil, sus resto fueron velados en la Gobernación y luego sepultado en e cementerio Jardines de la Paz en Guayaquil.
Alvarado era el padre de Vinicio y Fernando Alvarado Espinel, secretario General de la Administración Pública y secretario Nacional de Comunicación, respectivamente del gobierno del Presidente Rafael Correa.